Tras conocerse la petición de divorcio solicitada por Eva Longoria a Tony Parker, han comenzado a salir a la luz los motivos que han llevado a la actriz a tomar esta difícil decisión. Después de siete años juntos y tres como marido y mujer, la estrella de Mujeres desesperadas se llevó una gran decepción al descubrir cientos de mensajes en el móvil de su marido con una amiga común, la mujer de Brent Barry, compañero de Parker en el equipo de la NBA, San Antonio Spurs, durante los años 2004 y 2008 y actualmente retirado de la competición.
Mensajes insinuantes que no dejaban lugar a dudas
A raíz de conocerse estos datos a través del presentador Mario López -gran amigo de la actriz-, Parker admite la evidencia de haberse intercambiado cientos de mensajes insinuantes con Erin Barry, mujer del ex jugador de la NBA, pero asegura, a través de fuentes cercanas, que nunca mantuvo contacto sentimental con la que entonces era esposa de Barry. “Ellos se conocían, se enviaban mensajes. Había flirteo, pero jamás tuvo nada con ella”, admite. Pero, tal y como ha señalado López, no es la única vez que Tony Parker se veía envuelto en este tipo de líos amorosos, ya que poco después de casarse Parker la engañó con otra mujer con la que mantenía contacto a través de Facebook.
Todo este revuelo ha motivado que se haya conocido que Brent Barry, a quien todos creían como un hombre casado, y su mujer, Erin, se encuentran en pleno proceso de divorcio desde el mes pasado para llegar a un acuerdo sobre la custodia de sus dos hijos, de diez y cuatro años. El matrimonio Barry eran íntimos amigos de Tony Parker y Eva Longoria, de hecho ellos asistieron a la boda de la pareja celebrada en un castillo francés el 7 de julio de 2007. Una vez que Barry dejó el equipo, Eva Longoria seguía manteniendo contacto directo con Erin Barry y ésta acudía a cada uno de los cumpleaños de la actriz. “Así que ella está desolada, quiere que todos lo sepamos. Pero es fuerte”, asegura López.
Eva Longoria fuego divorcio
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